¡Hola de nuevo!. Va, que esta vez es la buena, voy a ponerme las pilas con el blog que acumulo un retraso que da miedo...
Retrocedo hasta el mes de septiembre del año pasado: llevo ya casi un mes sin pisar el monte y el cuerpo (y sobre todo la mente) ya piden un poco de aire fresco. Elijo acercarme al valle de Hecho para subir el Castillo d'Acher, una montaña archiconocida y de las más interesantes del Pirineo aragonés occidental. Además, toda esta zona de la Selva de Oza la tengo todavía "por descubrir" y quiero ir tachando pendientes.
Para subir al Castillo d'Acher utilizaré la ruta más habitual, que parte del fondo de la Selva de Oza y sube sin descanso hasta la cima. No tiene dificultades técnicas más allá del desnivel y me regalará paisajes bien chulos, destacando el paso por el curioso sinclinal colgado que constituye la parte alta de la montaña. ¡Vamos allá!.
Datos de la ruta:
Acceso: desde Zaragoza, tomar la A-23 hasta Jaca y, desde allí, continuar por la A-21 hasta abandonarla a la altura de Puente la Reina de Jaca, donde cogeremos la A-176 que nos va remontando el valle de Hecho hasta llegar al pueblo homónimo. Desde allí, se continua hasta la Selva de Oza por la HU-V-2131 (en invierno suele estar cerrada).
Fecha: 17 de Septiembre de 2022
Itinerario: Aparcamiento de la Selva de Oza - Barranco de la Espata - Refugio forestal de Acher (inmediaciones) - canal de acceso a la parte alta del Castillo d'Acher - Punta Sur (2.347 m) - Cima del Castillo d'Acher (2.384 m). Descenso por el mismo camino, pero sin pasar por la punta Sur.
Duración: -sin contar paradas-
- 00:00 h.- Aparcamiento Selva de Oza
- 00:15 h.- Cruce de la pista de la Espata
- 01:00 h.- Cruce del bco. de la Espata
- 01:30 h.- Refugio forestal de Acher
- 02:35 h.- Canal acceso parte alta del Castillo d'Acher
- 02:50 h.- Punta Sur del Castillo d'Acher
- 03:00 h.- Cima del Castillo d'Acher (2.384 m)
- 05:00 h.- Aparcamiento Selva de Oza
*A ritmo normal: 5 horas y 30 minutos en total.
Desnivel: 1.290 mD acumulados.
Longitud: 13,12 km en total.
Dificultad: Fácil +. Subida dura y sin descansos prácticamente desde el coche hasta la cima, pero sin dificultades técnicas más allá de un fácil apoyo de manos en el acceso a la parte alta del Castillo.
Track:
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Reseña de la ruta:
Son las 9 de la mañana cuando llego al aparcamiento habilitado un poco antes del campamento Ramino el Monje, en plena Selva de Oza (1.124 m). Tras calzarme y todavía con un fresquito bastante notable, me pongo en marcha y cruzo el puente sobre el río Aragón Subordán.
A mi espalda se queda la zona de Estriviella y Peña Forca
A los pocos metros, aparecen a la derecha varios paneles indicativos que señalizan el inicio del sendero hacia mi objetivo: el Castillo d'Acher. Así pues, tomo el sendero y, tras pasar junto a la zona de tirolinas y atravesar un gran claro, entro definitivamente al bosque.
A los pocos minutos, tomo un desvío a la izquierda (está perfectamente indicado) y comienzo a ganar altura. Me resulta imposible no parar unos segundos de vez en cuando para disfrutar de esta maravilla de bosque, compuesto principalmente por hayas y abetos, muchos de ellos de gran porte.
Y, un poco más adelante y tras menos de 100 metros de subida, el sendero cruza la pista de la Espata para, ahora sí que sí, continuar ascendiendo sin más cruces ni desvíos hacia la parte alta de la montaña. Llevo unos 20 minutos de marcha.
La subida es constante, pero se hace bastante llevadera, y además caminar por este bosque es una auténtica delicia. Si somos observadores podemos apreciar como el otoño empieza a dejarse ver en pequeños detalles.
Al alcanzar los 1.400 metros de altitud, las hayas y los abetos dan paso (momentáneamente) a una zona de pinar. Por aquí, la pendiente cede tras un tramo de subida algo más exigente y además un par de barranquillos cruzan el sendero.
Sigo avanzando y, tras una hora de ruta, el sendero me lleva a cruzar el barranco de la Espata (1.445 m), que había llevado a la derecha durante toda la ruta. Inmediatamente después, comienza una potente subida que me sacará del bosque.
Así pues, se ganan 150 metros de desnivel en un abrir y cerrar de ojos y se abandona definitivamente el bosque (1.600 m), apareciendo bien visibles y todavía muy arriba las murallas del Castillo d'Acher y sus características laderas rojizas.
Las vistas hacia Oza tampoco están nada mal
Ya por terreno despejado, la subida continúa con fuerte pendiente hasta llegar a las inmediaciones del refugio forestal de Acher (1.744 m), donde la cosa se relaja un poco. Hasta aquí he tardado una hora y media aproximadamente y de momento decido no parar (soy un poco cabezón).
Siguiendo con la ruta, ahora el sendero cambia repentinamente de dirección y se marcha hacia la izquierda (N), aunque solo por unos metros, ya que más adelante gira a la derecha (E) para discurrir paralelo a un pequeño arroyo.
Y, tras una larga diagonal bajo las murallas del Castillo, llego a la altura de una zona de grandes bloques de piedra (2.035 m) donde el sendero hace un giro de casi 180 grados (de E a NW) que inicia el ataque a la parte alta de la montaña.
Esta marmota ya está bien gorda y preparada para hibernar
Y, tras pasar por una zona de roca rojiza muy característica y con algo de caída por el lado izquierdo (sin problemas), el sendero asciende con fuerza en busca del punto débil de la muralla: una canal que nos permitirá acceder a la parte alta del Castillo d'Acher.
Marco la canal por la que se sube, aunque no es la única practicable
El terreno está un poco descompuesto, pero se sube relativamente bien y rápidamente alcanzo la amplia y corta canal, que supero sin dificultades y con tan solo algún ligero apoyo de manos. De esta forma, accedo al curioso sinclinal colgado que constituye la parte alta de la montaña (2.257 m) cuando el reloj marca 2 horas y media de ruta.
Con la cima ya a la vista (pero no tan cercana como a alguno le gustaría), el sendero gira ahora a la derecha (dir. E) y va trazando una media ladera bastante suave hacia el fondo de este curioso vallecito.
Aprovechando su cercanía, me desviaré unos metros del sendero para ascender también a la punta Sur del Castillo d'Acher (2.347 m), de la que tan solo me separa una pequeña subida y que me ofrece mejores vistas hacia este lado de las que tendré desde la cima principal. Llevo 2 horas y 50 minutos.
Hacia el NW: el interior del Castillo
Hacia el SE: el Bisaurín y Agüerri al alcance de la mano
Zoom con el Pirineo central de fondo
Oroel asoma sobre las paredes del Costatiza
Tras las fotillos de rigor, vuelvo a conectar con el sendero y encaro los últimos 50 metros de subida que me separan de la cima. ¡Vamos, vamos!.
Y, tras 3 horas de subida, llego a la bonita cima del Castillo d'Acher (2.384 m). Como no podía ser de otra manera, paro un buen rato a disfrutar de esta montaña emblemática del Pirineo occidental... y también de un buen bocata de tortilla de patata.
Hacia el NE: Guarrinza y el Pirineo francés
Labigouer
Collarada/Ip y Aspe
Bisaurín y su cara N
Hacia el E: la zona de Oza
El Chipeta Alto con el Orhi al fondo, asomando sobre el mar de nubes
Peña Forca y la sierra de Alanos
Mallo de Acherito
Mesa de los Tres Reyes
Y, tras un ratillo en la cima, inicio la bajada: no tiene pérdida ya que la voy a hacer por el mismo camino (sin pasar por la punta Sur, eso sí). El único punto donde hay que prestar un poco más de atención es en la canal, pero se baja sin ningún problema.
Y, tras abandonar las alturas, desciendo rápidamente, en busca de la protección del bosque, que el calor empieza a apretar. Llevo poco menos de 1 hora de bajada cuando paso junto al refugio de Acher.
Ya dentro del bosque, solo me queda saborear estos últimos kilómetros de ruta. Además, ahora las luces del mediodía le dan a este tramo unos colores y una magia espectaculares.
Secretos del bosque...
Y, con las piernas un pelín cargadas después de toda la bajada (como ya sabía de la subida, la pendiente no da tregua), llego de vuelta al aparcamiento tras 2 horas de descenso y 5 horas de ruta en total.
Muy contento con la ruta y con sumar esta cima tan emblemática a mi "currículum montañero", aprovecho para picotear algo a la sombra antes de irme y así disfrutar un rato más de esta estampa tan espectacular que ofrece la Selva de Oza.
Espero que os haya gustado. ¡Hasta la próxima!.
Hola Jorge.
ResponderEliminarSin duda, una de las montañas con más encanto del pirineo. La subí hace muchos años y recuerdo una ascensión más o menos cómoda, con unos contrastes brutales, bosque en la zona baja, praderío a media altura y ese valle sinclinal de la cima, impresionante.
Veo que salió un día espléndido, las fotos geniales y algunas, como la del interior del tronco del haya, muy original. Como no te metas caña de verdad, vas a conseguir, que se solapen las fechas, aunque, con una año menos 😀.
Tengo que volver a subirlo, aunque si puedo, por la Chimenea Ledormeur.
Salud y montaña.
Hola Eduardo!
EliminarLa verdad que es una chulada de montaña y, además, una de las imprescindibles del Pirineo. Sí, la verdad es que tengo que apretar porque tengo 6-7 entradas pendientes todavía...
Un saludo!