Aprovechando un ratito libre entre exámenes, publico esta salida que realicé el pasado mes de ciciembre en el Prepirineo de Huesca: se trata de la ascensión circular al Puchilibro, siguiendo el recorrido circular del PR-HU-105. Una ruta agradecida y sin dificultad que podemos complementar con la visita al castillo de Loarre, punto de partida de la ruta de hoy.
Datos de la ruta:
Acceso: desde Zaragoza, tomamos la A-23 hasta Huesca, allí abandonamos la autovía para continuar por la A-132 hasta la localidad de Ayerbe. Allí mismo nos desviaremos a Loarre por la A-1206 . Después, seguimos por la HU-A-3163 hasta el castillo de Loarre, donde encontramos un aparcamiento donde estacionar el coche.
Fecha: 1 de Diciembre de 2018
Itinerario: Castillo de Loarre - Cresta Este - Puchilibro - Cresta Oeste - Portillo Chara - Plan de Lugas - Castillo de Loarre.
Duración: -sin contar paradas-
- 00:00 h.- Castillo de Loarre
- 00:45 h.- Inicio cresta Este
- 01:10 h.- Cima del Puchilibro
- 01:55 h.- Portillo Chara. Fin cresta Oeste.
- 02:20 h.- Castillo de Loarre
Desnivel: 550 metros de desnivel en ascenso y descenso.
Longitud: 7,2 kilómetros en total.
Dificultad: Fácil. Ruta sin ninguna dificultad, salvo un pequeño destrepe en la cresta oeste.
Reseña de la ruta:
Desde el aparcamiento del castillo de Loarre (1.070 m) comenzamos a caminar bajo una fina lluvia que nos acompañará durante un buen rato. En el extremo del aparcamiento nos topamos con el inicio del camino, junto a unos paneles informativos.
Así pues tomamos la pista que se aleja en dirección Este y que rápidamente nos deja en la entrada del bosque, donde encontramos nuevas señalizaciones hacia nuestro objetivo.
Ahora seguimos hacia el "Pusilibro", pero dentro de un rato desembocaremos en este punto por el sendero que indica "Rasal" (izquierda) ya que vamos a hacer una circular.
Nos tomamos la subida con calma, observando todos los detalles del bosque, compuesto principalmente por pinos royos y laricios (y parece que repoblado en algunas zonas).
Una zona despejada de arbolado nos permite contemplar el castillo de Loarre y la Hoya de Huesca.
No acostumbrarnos a movernos por la zona del Prepirineo (Reino de los Mallos, Sierra Caballera, Guara, ...) y la verdad es que cada vez que hacemos alguna ruta por aquí me sorprende y me dan ganas de explorarla un poco más... pero es que el Pirineo tira mucho...
Cruzaremos alguna trocha con cuidado de seguir lo hitos para evitar despistes. Hay un punto donde el sendero se acerca mucho a una pista pero ojo, no saldremos a ella sino que continuaremos por la senda (lo remarco puesto que es un error relativamente fácil de cometer).
Íbamos tan tranquilos cuando de repente.... ¡pam!... un disparo, deben de estar de batida por aquí cerca y empiezan a resonar disparos por todos lados, aunque la zona ocupada por los cazadores está bien controlada iremos con ojo...
Ahora el sendero desemboca en una pista que recorreremos durante unos pocos minutos hasta tomar un sendero muy claro que sale a la izquierda y que además está balizado con las marcas blancas y amarillas del PR. Estamos a 1.350 metros de altitud y llevamos 40 minutos.
Alcanzaremos la cresta este del Puchilibro y giraremos hacia el oeste (izquierda) para ascender por ella hacia la cima. Hemos dejado abajo el pinar y ahora caminamos por terreno dominado por los erizones.
Sin tener ninguna dificultad este tramo si que le da bastante ambientillo de montaña a la ascensión.
El pueblo de Loarre vigilado por su castillo, la perspectiva engaña puesto que están alejados.
La cresta nos deja en una loma que podemos denominar como la antecima sur (1.520 m) del Puchilibro. Tan solo medio kilómetro nos separa de la cima, ¡a por ella!. Llevamos 1 hora.
Al principio, el sendero toma bastante pendiente, pero luego prácticamente llanea hasta alcanzar la cima del pico Puchilibro (1.595 m): el punto más alto de la Sierra Caballera. Nos ha costado 1 hora y 10 minutos desde el castillo de Loarre.
La cima nos recibe gélida con pequeñas copos de nieve traídos por el viento de norte, esto, sumado a que el día está bastante gris y no podemos ver demasiado bien las fantásticas vistas que hay hacia el Pirineo, nos hacen estar apenas 5 minutos en la cumbre antes de iniciar el descenso. Tampoco vimos ovnis...
Collarada y la Partacua. En primer plano la Peña Oroel.
Ordesa y Monte Perdido.
El Cotiella.
Las Maladetas, sorprendente lo bien que se ven aun estando bastante lejos.
La sierra de Guara
El valle de Rasal y al fondo la zona del embalse de la Peña.
Abandonamos la cima y volvemos a la antecima sur. Y allí, si bien antes hemos subido por la vertiente este, ahora descenderemos por la oeste siguiendo indicaciones de "Repetidor (cresta)".
Una corta bajada primero por terreno despejado y luego por zona boscosa nos deja en el inicio de la cresta oeste del Puchilibro (no confundir con la este, que es por donde hemos subido). Aquí tenemos dos opciones: o tomar la cresta hasta las antenas (azul claro) o bien acortar en una bajada más pronunciada obviando la cresta (azul oscuro).
Como la ruta es corta nosotros decidimos seguir por la cresta hasta las antenas, que si bien el recorrido es más largo también es más entretenido y tiene mejores vistas. Así pues iremos avanzando por la cresta sin demasiada dificultad pero siempre con cuidado.
Vistas hacia el norte: bajo nosotros el valle del Garona y la Foz de Fuenfría, y en la lejanía la Peña Oroel y el Pirineo con cumbres con las sierras de Collarada y la Partacua.
La única dificultad la encontramos justo al final de la cresta, donde un resalte de unos 5-10 metros nos impide continuar. Retrocedemos unos metros y descendemos por la izquierda para bordear por terreno sin senda dicha pared.
Una vez sobrepasado este tramo atravesamos una zona un poco cerrada pero cada vez más pisada hasta llegar a las antenas del Portillo Chara (1.413 m), donde vuelven a aparecer las señalizaciones del PR. Llevamos 45 minutos desde la cima y algo menos de 2 horas en total.
A partir de ahora iremos alternando tramos de sendero con tramos de pista siempre guiados por los hitos y las marcas del sendero. También pasaremos junto al enlace del sendero directo (el que evitaba la cresta) con nuestro camino.
Tras perder más de 150 metros de altitud, alcanzamos el Plan de Lugas (1.270 m), donde hay una pequeña cabaña en buen estado que podría servir de refugio. Nos despedimos del Puchilibro y seguimos hacia abajo.
Continuamos con la marcha, el sendero vuelve a meterse en el bosque y sigue descendiendo hacia el castillo. Sorprende que en toda la mañana no nos hayamos cruzado con nadie (exceptuando los cazadores).
Llegando al castillo unos peñascos que hay junto al camino nos ofrecen unas vistas privilegiadas del entorno. Creo que hay varias vías de escalada en estas paredes.
Tras esa pequeña parada para ver el castillo desde lo alto, seguimos descendiendo hasta llegar a la intersección del inicio de la ruta, donde el PR-HU-105 cierra el bucle. Últimos metros de la ruta.
Y así, tras 1 hora y 10 minutos desde la cima y 2 horas y 20 minutos en total llegamos al aparcamiento del castillo de Loarre (1.070 m), cerrando la circular.
En resumen: fácil ascensión a uno de los picos más conocidos del Prepirineo de Huesca muy recomendable para los días en los que el Pirineo no quiere visitas.
Espero que os haya gustado. ¡Hasta la próxima!.
Hola Jorge.
ResponderEliminarHice está circular el invierno pasado con mi mujer y nos gusto mucho (salvo la segunda cresta). Sin duda como el pirineo no hay nada igual, pero la verdad es que queda lejos y estas sierras dan mucho juego.
Viviendo en la ciudad, hay muchas posibilidades, la sierra de Algairén por ejemplo es una maravilla y está a poco más de media hora de Zaragoza, o el Parque Natural del Moncayo, que tiene muchas posibilidades, aunque por desgracia para muchos "solo" es el Moncayo.
Un saludo
Hola Eduardo!
EliminarQué razón tienes... la verdad es que la Sierra de Guara tiene lugares que tengo en la lista de pendientes: Vadiello, el Mascun, el Tozal de Guara, Alquezar,... pero que al final siempre se me quedan en el tintero.
En cuanto a Algairen para mí es una gran desconocida y del Moncayo aún me falta por visitar la zona de Talamantes y también Horcajuelo. Y también me llama últimamente la zona de Beceite...
Incluso casi sin salir de la ciudad tenemos los Galachos de Juslibol que a mí me vienen de perlas los findes de semana que tengo poco tiempo (casi todos con esto de la universidad jeje).
En resumen, en Aragón tenemos la suerte y la desgracia de que hay muchísimas posibilidades para montañear. Gracias por comentar, un saludo!