Raquetas en Oroel: Senda de los Lobos y punta de Sora (1.707 m) desde Barós

¡Buenas a todos!. El mes de enero pasado, tras las grandes nevadas que trajeron las borrascas Fien y Gerard, me acerqué al Pirineo para disfrutar de nieve y hacer algo con las raquetas.

Como el riesgo de aludes estaba todavía alto, decido quedarme por la zona de Oroel. La idea es ascender desde Barós pasando de subida por la senda de los Lobos y haciendo todo el cordal desde Bacials hasta la Cruz de Oroel para, finalmente, bajar por la ruta clásica hacia el Parador y desde allí de nuevo hasta Barós.

La gran cantidad de nieve acumulada y los árboles caídos y cruzados sobre el camino me pondrán las cosas difíciles pero, a cambio, disfrutaré de una visión impresionante de todo el Pirineo nevado.
 


Datos de la ruta:

Acceso: desde Zaragoza, tomamos la  A-23  hasta Jaca. Accederemos por la entrada sur ( N-330 ) y, en la primera rotonda de la localidad, nos desviaremos hacia Barós. Aparcar cerca de la iglesia.



Fecha: 24 de Enero de 2023
Itinerario: Barós - Fuente de Barós - Senda de los Lobos - collado junto a la punta Bacials - Punta de Sora (1.707 m) - collado de las Neveras - Parador de Oroel - Fuente de Barós - Barós.
Duración: -sin contar paradas-
  • 00:00 h.- Barós
  • 00:45 h.- Fuente de Barós
  • 01:15 h.- Inicio senda de los Lobos
  • 03:00 h.- Colladito junto a punta Bacials
  • 03:20 h.- Punta de Sora (1.707 m)
  • 03:30 h.- Collado de las Neveras
  • 04:05 h.- Parador de Oroel
  • 04:35 h.- Fuente de Barós
  • 05:05 h.- Barós
Desnivel: 779 mD acumulados.
Longitud: 13,59 km en total.
Dificultad: Media en las condiciones de hoy, con abundante nieve polvo que dificultaba y endurecía el avance y con multitud de árboles caídos. Sin nieve no hay dificultades técnicas reseñables (fácil).

Track:
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Reseña de la ruta:

Con unos muy agradables -7ºC, comienzo a caminar desde el coqueto pueblecito de Barós (935 m), hoy completamente cubierto de nieve. Tomaré una pista sin señalizar que parte junto a la iglesia en dirección S, hacia la peña Oroel, y que rápidamente deja a la derecha la ermita de Santiago.

Iglesia de San Fructuoso


La ermita de Santiago

Los primeros minutos, la pista prácticamente llanea por terreno despejado, dejando a la derecha el barranco Fontanales. Para los urbanitas como yo, impacta ver tanta nieve por todas partes: en Jaca se acumularon 35 cm de nieve y por aquí ya rondaremos el medio metro; menos mal que la gente ya ha pateado por aquí y tengo una buena autopista...

Desde aquí se visualiza prácticamente toda la ruta



Las cimas del Pirineo también van bien cargadas de nieve, aunque están algo venteadas en las zonas más expuestas.

La sierra de la Partacua

Las Tres Sorores (Treserols)

Tras aproximadamente 30 minutos y al alcanzar la cota 1.000, la pista se transforma en senda y entra en el bosque (pinar) para discurrir durante un rato sobre el barranco Riazo. 




Tras 45 minutillos de camino llego a la fuente de Barós (1.045 m), situada en el fondo del barranco. Hoy el ambiente aquí es gélido al ser una zona umbría, por lo que no encuentro ni rastro de agua líquida.




Nada más dejar atrás la fuente, una señal con indicaciones hacia el Parador me invita a desviarme hacia la izquierda para continuar la subida. Existe otra senda (sin señalizar) que sale por la derecha y quizás es algo más directa, la utilizaré en el descenso...





Y, tras ganar algo más de 100 metros de desnivel más, la senda desemboca en la pista asfaltada (1.175 m) que une el Parador de Oroel con el pueblo de Navasa. Justo enfrente, arranca la senda de los Lobos (sin señalizar) y, si bien tenía pensado irme hacia el Parador y subir por la normal, finalmente me animo a subir por ella. Llevo 1 hora y 15 minutos.


Collarada quiere asomar entre los pinos

La senda comienza ganando altura con decisión para, poco después, iniciar una larga diagonal en dirección SE que, si bien también es en ascenso, tiene menos pendiente.



Voy avanzando como puedo ya que la gran cantidad de nieve acumulada me hace hundirme hasta más allá del tobillo en cada paso y, si a esto le sumamos la gran cantidad de árboles cruzados que me voy encontrando, el avance se vuelve penoso por momentos.




Por momentos, lo único que me consuela es pensar en las pedazo de vistas que voy a tener cuando salga del bosque... si es que consigo salir.



Tras sortear a duras penas unos cuantos árboles más, finalmente la senda realiza una última subida bastante tiesa de unos 50 metros que me saca al cordal de Oroel (1.639 m), junto a la punta Bacials (1.698 m), ya en terreno despejado.




Llegar hasta aquí me ha costado 3 horas (sin contar paradas), mucho más de lo que tenía pensado, por lo que rápidamente comienzo a recorrer el cordal en dirección W, hacia la Cruz de Oroel.




Tras algunos sube y baja en los que me he llegado a hundir hasta la cadera, paso por la modesta cima de la punta de Sora (1.707 m), marcada con un pequeño hito. Realmente tan solo es una cota más del cordal, así que apenas paro. Llevo 3 horas y 20 minutos.


Vistas hacia la Cruz de Oroel y toda su cara S


Un poco más adelante y tras pasar sobre las neveras (1.660 m), aprovecho un hito de cemento que sobresale de la nieve para sentarme y hacer una buena parada en la que reponer fuerzas y disfrutar de las vistas. Aunque me daría tiempo, voy muy justo de fuerzas y he decidido renunciar a subir hasta la Cruz... ¡otra vez será!.


Se ve prácticamente todo el Pirineo aragonés: desde Ezkaurre hasta el Posets

Una pano con los nombres de las principales cimas

Bisaurín

Pico de Aspe

Montes de Astún y, sobre ellos, el Sesques

Jaca y el valle del Aragón

El macizo de Collarada

Collarada

Jaca, completamente nevada

Peña Retona

Peña Telera y Peña Parda

La sierra de Tendeñera


Ahí se queda la Cruz... 

Tras un buen rato parado, una brisa heladora me anima a retomar la ruta y empezar la bajada. Para ello, desciendo un pequeño resalte rocoso (no hace falta destrepar) y, al llegar al collado de las Neveras (1.668 m), sigo las indicaciones hacia el Parador de Oroel. Llevo 3 horas y media (sin contar paradas).



Una tras otra, voy bajando cómodamente y bastante rápido las 33 zetas que me separan del Parador. Se nota que esta senda constituye la "ruta normal" a la cima de la peña Oroel porque la huella es prácticamente una autopista. 



Así pues, llego al Parador de Oroel (1.179 m) cuando llevo poco más de 4 horas de ruta. Acostumbrado a verlo a tope de coches, se me hace raro estar hoy aquí con tanta nieve y completamente solo. Hago otra paradita en su mirador.




Tras el descansito, prosigo con la ruta. Ahora viene un tramo algo enrevesado al estar sin señalizar: comienzo siguiendo la carretera en dirección W (Jaca), pero a los 300 metros tomaré un sendero a la derecha (NW) marcado con algunas estacas. Tras avanzar 150 metros, llego a un cruce donde me desviaré de nuevo a la derecha (NE), siguiendo una pista.

Desde el parador tomo la carretera hacia Jaca (dcha, W)

A los 300 metros me desvío a la derecha (NW) por esta senda 

Más adelante, en este cruce, de nuevo me voy a la derecha (NE)

Y, por último, al llegar a un colladito (1.110 m) al sur del monte Mocholín, me desviaré de nuevo a la derecha (E) para tomar una sendita que baja decidida por el centro del barranco y desemboca en la fuente de Barós (1.045 m), cerrando el círculo.

Último desvío a la derecha (E) (todos sin señalizar) que me llevará hasta la fuente de Barós



Y, desde allí, ya solo tengo que desandar el mismo camino de esta mañana hasta llegar de vuelta a Barós (935 m), finalizando la ruta tras algo más de 5 horas de marcha (sin contar paradas).



Bastante cansado y habiendo disfrutado de sobras de la nieve, emprendo el viaje de vuelta a Zaragoza... a veces pienso en que me gustaría quedarme a vivir por estos lares, pero las cosas en el Pirineo no son tan fáciles como puede parecer, así que de momento me quedo con poder disfrutarlo casi cuando quiera.

¡Hasta la próxima!.

Comentarios

  1. Hola Jorge.

    Cuando nieva en cantidad, en cotas bajas, hay que aprovechar para disfrutar de parajes o montañas como la Peña Oroel en modo invernal.

    Eso sí, me cuesta creer que llegarás con la "reserva", que eres joven y estás más fuerte que el vinagre 😆. Si bien en la subida, te hundías hasta la cadera, lo bueno, es que para bajar por la normal, estaba bastante bien, porque, por norma general ese sendero en invierno, tiende a tener unas buenas placas de hielo, sobre todo en la zona de las neveras.

    Me has dado una buena idea (empezar desde Baros), por si vuelve a caer una buena nevada.

    Salud y montaña.

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    Respuestas
    1. Hola Eduardo!!

      La verdad es que la soba subiendo por la senda de los Lobos y el cordal fué de las que cuesta olvidar unos cuantos días... acabé de nieve hasta los mismísimos (nunca mejor dicho 🤣). También es verdad que el catarrazo que estaba cultivando algo debió influir.

      Eso sí, la bajada como bien dices eataba perfecta y bajé tan bien que,bal llegar al coche, me quedé con ganas de haber tirado hasta la Cruz: para otro día será ya subiremos los dos desde Barós, aunque una nevada de estas no se pilla todos los años... 😔.

      Un saludo!!

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